Espacios de participación promotores del envejecimiento saludable

Participar en actividades sociales, culturales, deportivas, de ocio o de voluntariado es una buena forma de aumentar y mantener el bienestar de las personas.

Realizar nuestros proyectos personales en contacto con la sociedad que nos rodea contribuye al envejecimiento saludable. 

Podemos participar de diversas formas:

  • A través de las asociaciones o entidades ciudadanas para colaborar en proyectos sociales. Puedes participar con las asociaciones más cercanas donde vives informándote en la web o en la sede de tu Ayuntamiento.
  • A través del voluntariado o trabajo altruista y solidario para mejorar la vida de las personas y de la sociedad que se realiza a través de entidades de voluntariado como asociaciones y O.N.G. Puedes contactar con las distintas asociaciones de voluntariado que operan en tu localidad.
  • A través de la participación política: la experiencia de las personas mayores ofrece un valor añadido a aportar y su presencia a nivel político es necesaria ya que representan cada vez un grupo social más numeroso.
  • A través de la educación permanente: permite continuar aprendiendo durante toda la vida. Existen programas educativos dirigidos a personas mayores que son muy variados y que abarcan desde cursos de alfabetización, talleres para el mantenimiento de la memoria, hasta aprendizaje de idiomas, nuevas tecnologías como el ordenador, Internet, el uso del móvil, la Universidad para Mayores, etc.
  • A través de los distintos movimientos sociales y ciudadanos que luchan por diversas causas: pro derechos humanos, protección de los animales, ecologistas, pacifistas, organizaciones religiosas, apoyo a inmigrantes, etc.
  • A través del ocio y tiempo libre. Existe una gran diversidad de organizaciones y asociaciones para dedicar al ocio: deportivas, peñas, asociaciones culturales, centros culturales, bibliotecas, cines, teatros, etc, que realizan un gran número de actos culturales: conferencias, exposiciones de pintura, obras de teatro, conciertos de música, baile, etc.

Cada persona debe pensar, según sus circunstancias y sus gustos personales y según los recursos que existan en su medio más cercano como el barrio o el municipio, qué actividades de participación, aprendizaje y ocio puede realizar y practicar de forma continuada.

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